Galletas de avena crujientes y doradas sin gluten
60 Minutos | 12 Galletas | Fácil
Si buscas una receta de galletas de avena crujientes, con un sabor riquísimo y que se deshacen en la boca, estás en el lugar correcto. Además, ¡se preparan con tan sólo tres ingredientes!
Lo cierto es que no soy una persona que coma muchas galletas. Posiblemente es una de las cosas que menos echo de menos desde que llevo una dieta estricta sin gluten.
Lo notaréis porque en el momento de publicar esta receta no tenía recetas de galletas en el blog. Tan sólo esta receta de pastas de anís.
Eso sí, desde entonces he hecho los deberes y he compartido contigo mis recetas de:
Pero de vez en cuando tengo unas ganas tremendas de comer algo crujiente que no me quita el pan tostado.
Bueno, pues he preparado estás galletas 4 veces seguidas, cada vez que veía que se iban a acabar las que tenía. No te digo más.
Estás son unas galletas de avena crujientes, que se deshacen en la boca, con un sabor riquísimo a mantequilla, y un regusto malteado que le confiere hornearlas hasta que están doradas.
La receta de la que he partido es la de shortbread cookies. Y para desglutinizarlas he sustituido la harina de trigo por una de las harinas que más me gustan: avena certificada sin gluten.
La avena que se comercializa es al menos semi-integral, con lo que la fibra que contiene dificulta la absorción del azúcar y la matequillaza que llevan estas galletas. Así entran menos remordimientos al comerse un plato entero (que lo harás).
La avena certificada sin gluten
Comento, para quienes llevéis poco tiempo con la dieta sin gluten, o para quienes tuvierais entendido lo contrario, que la avena en si no tiene gluten.
Si se la incluye normalmente entre los cereales que no debemos consumir es debido a que contiene normalmente trazas de otros cereales con gluten. Por ello es imprescindible que elijas una marca que esté etiquetada como apta.
Y también porque contiene avenina, una proteina que puede provocar reacción cruzada en personas con una enfermedad por sensibilidad al gluten.
Si llevas poco tiempo diagnosticado es mejor que emplees otra harina natural sin gluten. No emplees mezclas comerciales ya que la absorción de líquido es inferior y no obtendrás la consistencia adecuada.
La receta
Te sorprenderá que no lleven ningún tipo de sustituto del gluten. Pero lo cierto es que en masas secas (artículo) no son necesarios. De hecho, en las galletas con gluten se amasa lo justo para evitar precisamente desarrollar las propiedades elásticas del gluten.
Es por ello que esta receta de prepara con tan sólo 3 ingredientes: azúcar + el doble del peso de azúcar de mantequilla + el triple del peso de azúcar de harina de avena. FIN.
Es importante que la mantequilla que uses esté a temperatura ambiente. Si la has tenido en frío, dejala 15 minutos fuera, pero no la calientes para derretirla, o la consistencia de la masa será demasiado pegajosa.
Es por ello que durante el proceso enfriamos la masa dos veces. La primera antes de extender la masa para que esta sea más manejable. La segunda, para evitar que la harina absorba la mantequilla, y así obtener una consistencia más ligera y crujiente.
Es importante también que las vigiles mientras las horneada y las saques cuando adquieran un ligero color dorado. Piensa que al sacarlas del horno se siguen cocinando con el calor residual, y si te pasas podrían quedar demasiado quemadas. Cada horno es un mundo, así que no las descuides. Es preferible que se doren algo menos a que se quemen.
Después de esta breve explicación ¡Vamos a ver cómo se preparan!
Cómo preparar estas galletas de avena crujientes y doradas sin gluten
Ingredientes
Para 12 galletas
50 g de azúcar glas (puedes moler la que tengas)
100 g de mantequilla
150 g de avena sin gluten
pasos a seguir
Muele los copos de avena en un molinillo o procesadora de alimentos. También puedes usar harina de avena, pero moliendola en casa, las galletas adquieren una consistencia más rústica.
Comenzamos mezclando la mantequilla con el azúcar. Es conveniente que la mantequilla esté al menos 15 minutos a temperatura ambiente para que sea fácil de mezclar. Nunca calientes para facilitar que se derrita.
Mezclamos con un tenedor hasta tener una pasta y añadimos la harina de avena. Mezclamos hasta tener una masa homogénea.
Con ayuda de una rasqueta de cocina rebañamos bien los bordes del cuenco, formamos una bola y guardamos al menos 20 minutos en frío.
Sacamos y extendemos entre dos láminas de film plástico de cocina. Dejamos de medio centímetro de grosor.
Es necesario volver a enfriar antes de meter al horno. Si las apilas, asegúrate de separarlas con papel de horno para que no se peguen.
Calienta el horno a 180°C. Coloca en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear dejando suficiente espacio entre ellas.
Introduce en el horno a altura media y hornea entre 12 y 15 minutos, o hasta que adquieran un ligero color dorado.
Puedes cubrir con azúcar glas una vez se enfríen. Guárdalas en un recipiente hermético hasta el momento de consumirlas. Así se conservarán varios días en perfecto estado.
Con café, con chocolate o simplemente solas… verás que delicia. ¡Buen provecho!
Hola! Se puede reemplazar la mantequilla por aceite de coco o aceite de oliva?
Hola!Las hice hoy y nos encantaron. Están muy muy buenas las galletas. A mi hijo de 8 años le encantó hacerlas, yo solo le ayudé. Gracias por la receta!
Hola, que maravillosa receta, se puede hacer con harina de quinoa?
Hola Eva!!!!!
No están buenas, están «requetebuenas». Mi chico casi no las pruebas jejejeje
Y eso que les faltaba un punto más de horno y cocción, porque no podía darles forma y opté por tomar pedazos de masa y aplastarlas con las manos, con lo que me quedaron un poquito más gorditas que las tuyas…
Aún así, brutales y súper sencillas!!!
Mil Gracias por tanta buena receta!!
se puede sustituir el azucar por otro producto??