GALLETAS SIN GLUTEN fáciles de hacer. ¡Con 3 ingredientes!
90 Minutos | 12 galletas | Fácil
Hoy te traigo unas GALLETAS SIN GLUTEN fáciles de hacer, preparadas además con tan sólo 3 ingredientes comunes. Pero esta galletas sin gluten no sólo son fáciles y rápidas de preparar, ¡además están buenísimas!
Hoy quiero compartir contigo una receta de galletas sin gluten muy muy fácil. Una galletas de mantequilla sin gluten de tres ingredientes, o “shortbread cookies” por su nombre anglosajón.
“Shortbread” significa masa quebrada. Por un motivo, la fórmula es la misma. Y es que esta galletas se preparar con tan sólo 3 ingredientes comunes: harina, sin gluten en nuestro caso, mantequilla y azúcar. Sin usar polvo de hornear, ni sustitutos del gluten, ni huevo…
Y con una proporción además muy sencilla de recordar: 1 medida de azúcar, 2 veces su peso en mantequilla, y 3 veces su peso en harina.
A diferencia de la masa quebrada, estas galletas se hornean lo justo para que la harina se cocine, pero no se disipe mantequilla en exceso. El resultado son una galletas delicadas de sabor y de textura. Un poco parecidas a las pastas de té. Riquísimas.
Esta receta de galletas sin gluten
Para la receta de hoy voy a emplear harina de arroz, pero puedes usar la harina de cereal o pseudocereal sin gluten de tu preferencia. De hecho, mi receta de galletas tostadas de avena sin gluten se prepara igual, solo que éstas llevan un horneado más largo para que se tuesten.
Las galletas shortbread se hornean pocos minutos, entre 12 y 15 dependiendo del horno y del grosor de las galletas. Se trata de que la mantequilla no se disipe, y que las galletas queden “jugosas” (pero no blandas, no sabría definirlo muy bien).
Cuesta un par de intentos dar con el tiempo exacto: ni poco que queden poco hechas y no sepan a nada, ni mucho que se evapore la mantequilla. Deben quedar ligeramente doradas en la base pero sin llegar a tomar color.
Aunque si te soy sincera, a mí no me importa que se tuesten un poco, creo que ésto realza su sabor.
La receta clásica no lleva más que los ingredientes mencionados (más un poco de sal si la mantequilla no la lleva), pero es bastante habitual añadir un poco de esencia de vainilla a la masa. O cubrirlas con chocolate tan pronto como se enfrían.
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Cómo preparar estas galletas sin gluten fáciles y de tres ingredientes
Ingredientes
Para 12 galletas
50 g de azúcar glas (impalpable)
100 g de mantequilla
150 g de harina de arroz
1 pizca de sal (si usas mantequilla sin sal)
Opcional: esencia de vainilla…
Opcional: 100 g de chocolate para cobertura, almendras picadas…
PASOS A SEGUIR
Piensa en dejar la mantequilla a temperatura ambiente una o dos horas antes de preparar las galletas. No la calientes para ablandarla.
Coloca la mantequilla a temperatura ambiente en un cuenco suficientemente grande, añade el azúcar y la pizca de sal si estás usando mantequilla sin sal. Si vas a añadir esencia de vainilla o alguna especia, hazlo también ahora.
Mezcla con un tenedor hasta que todos los ingredientes se integren. Una vez que lo hagan, sigue batiendo un minuto o dos, hasta obtener una mezcla cremosa.
NOTA: Si empleas varillas eléctricas bate la mantequilla antes de agregar el resto de ingredientes. Si la mantequilla es de buena calidad, seguirá relativamente firme a temperatura ambiente. Y si intentas batir con varillas sin ablandar la mantequilla primero, saltará el azúcar por el aire.
Una vez que tengas una mezcla cremosa añade la harina, y mezcla hasta que se incorporen todos los ingredientes perfectamente. Asegúrate de que no quedan pegotes de mantequilla sin incorporar.
Cuando lo tengas, forma una bola, envuelve con film plástico de cocina y deja reposar al menos media hora dentro del frigorífico, para que la mantequilla solidifique y la masa sea menos pegajosa.
Una vez que la masa haya reposado extiendela con ayuda del rodillo hasta dejarla de medio centímetro de grosor. La forma más fácil es entre dos pliegos de film pástico. Si lo haces sobre la mesa enharinada lleva cuidado de que no se pegue, pero tampoco añadas excesiva harina.
Corta las galletas con un corta-pastas, con un vaso de borde fino o con un cuchillo. Ve colocándolas sobre papel de horno y a su vez sobre un plato o tabla, ya que deben reposar de nuevo en frío. Si las apilas para que quepan en el frigorífico, sepáralas con papel de hornear para que no se peguen.
Deja reposar media hora al menos, y transcurrido este tiempo comienza a calentar el horno a 180ºC.
Cuando el horno esté caliente, saca las galletas del frigorífico y colócalas sobre una bandeja de horno, preferiblemente sobre el mismo papel de horno que has usado.
NOTA: Si el grosor de las galletas es irregular, procura colocar las más finas en el centro y las más gruesas a los lados, ya que estas últimas recibirán más calor.
Cuando el horno esté caliente introduce la bandeja a altura media, y hornea unos 12-15 minutos a 180ºC con calor arriba y abajo, o hasta que las galletas tomen un ligero color en la base.
Saca del horno y deja enfriar completamente antes de moverlas de la bandeja, ya que las galletas son frágiles mientras están calientes.
Si quieres, una vez que están frías, puedes cubrir con chocolate, almendras picadas…
Guarda en una caja bien cerrada hasta el momento de consumirlas. ¡Buen provecho!